Lo nuestro
Aunque algunos discutan
y otros guardan silencio,
muchos afirman rotundos
que el mundo es de unos pocos.
Hay destilado veneno
en botellas de codicia,
en copas heladas envidia;
en sofisticadas salas de rascacielos
se rubrican mentiras con dinero,
en algunas sacristías dios es un cero.
Las creencias, los gestos, la fe
en nosotros mismos al levantarnos,
la voluntad y la constancia,
son los pilares de lo nuestro.
Las nubes de especuladores
pueden añadir los ceros
a un cuadro, a una voz,
no domestican al genio,
a la fuerza que transmite,
a la emoción, al mensaje,
la creación es lo nuestro.
Plazas, estatuas, caminos, pueblos,
puestas de sol, el hilo de un abrazo,
la onda expansiva de un pensamiento,
el saber, la herencia, es lo nuestro.
Rechazamos el sol embotellado,
las parcelas en la luna,
el milagro de un cosmético,
el triunfo añadido a un producto.
La memoria, el amor, la pena,
alegrías, talentos, decisiones,
la música del pulso y la vida,
todo eso es el mundo y lo nuestro.
