EVOCACIÓN
En la claridad rojiza de las cocinas
en sus poyetes de agradecido barro
o en el vapor de sus renegridas ollas,
hay una luz suspendida.
En el corazón de la vieja mesa
con su latido de cucharas,
la severidad de los cuchillos
se ablanda con la compañía.
En la despensa abierta a los
asombros
permanece el soplo de la infancia,
el espíritu familiar alrededor de los manteles,
a fuego lento se cuece la nostalgia.
(Poema cedido para cocinas y comedores sociales a SOS Ángel de la Guardia)
Imágenes de Internet.
Los poemas nunca cierran los ojos a lo solidario; así que es hermoso pensar que tus versos dan un poco de luz y ponen sol en el cielo de alguien. Besos.
ResponderEliminarUn poema que encierra una grave realidad en nuestra sociedad.
ResponderEliminarMi felicitación al poeta Ángel de la Guardia y a ti por compartirlo.
Un gran abrazo amiga María José.
Gracias por darnos a conocer este poema el cual produce inmensa tristeza, la injusticia danza por el mundo a sus anchas.
ResponderEliminarUn abrazo amiga.
¡hola, Mª José!
ResponderEliminarEs lindo aunque melancólico, este poema,es el pan nuestro de cada día que va en aumento por desgracia.
Gracias por tu sensibilidad.
Un abrazo y feliz fin de semana.