Perdona mi demora, voy a los pocos entrando en vuestras casas. Primero mil gracias por tu huella bonita.
Las tardes de alas, efectivamente vuelan y son el puntal de la noche. Aunque todavía se alargan los días y estas se hacen cortas, y eso es bueno para aquellos que el sueño se le escapa, como a mí.
Siempre es un placer pasar por esta tu casa, reina. Te dejo beso y se muy, muy feliz.
Hola María Jesús, breves pero muy hermosas palabras. Siempre es un placer pasar por tu espacio.
ResponderEliminarBesos de Espíritu sin Nombre.
A veces sobran las palabras
ResponderEliminarque lentas caen como la tarde. Siempre me alegran tus visitas, Conchi. Un beso.
El capricho de la nubes incita a la imaginación de poeta. Precioso, amiga.- Un abrazo
ResponderEliminar¡Hola Mª José!
ResponderEliminarPerdona mi demora, voy a los pocos entrando en vuestras casas. Primero mil gracias por tu huella bonita.
Las tardes de alas, efectivamente vuelan y son el puntal de la noche. Aunque todavía se alargan los días y estas se hacen cortas, y eso es bueno para aquellos que el sueño se le escapa, como a mí.
Siempre es un placer pasar por esta tu casa, reina.
Te dejo beso y se muy, muy feliz.
Muy bonito y conciso a la vez, una capacidad natural en ti.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Bien poético, amiga. Maravilla, que no necesitas muchas palabras; para mucho decir. Te felicito.
ResponderEliminarAbrazo