Memoria histórica
Fueron silencios de espinas
los que hurgaron en las fosas,
sacando el agua escondida,
hueso y memoria abrazados
al tiempo de las ruinas.
Savia dieron a los árboles
petrificados gestos, voces
sesgadas, un clamor subterráneo,
eco entre las raíces.
Hay un precario olvido
con óxido encadenado,
al miedo de matarifes,
a la hierba profanada.
Muy bueno María,me ha gustado leerte,siempre es y será un placer leerte,que no decaiga tu pluma.
ResponderEliminarSaludos.
Son palabras como las tuyas las que me hacen no cejar en el empeño.
ResponderEliminarGracias
¡¡Zuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuups!!
ResponderEliminarY yo apostillo sobre el anterior comentario, eres estupenda amiga, sigue escribiendo y regalanos tus escritos.
Un beso de la brujita MORIMÓ.