Máscara
Cruza el umbral, vergel
de sencillez,
deja su otro rostro, el
de metal,
rígido, inanimado en la
pared.
En las habitaciones de
su casa
recupera el molde de
sus rasgos,
la sensatez, el hilo
del corazón.
Cae debilitada la
costra, expira
por todos los sumideros
de la piel,
regresa al origen
placentero.
La indiferencia, la
impostura,
capas unidas a la ropa
triste,
a la exigencia de
reglamentos,
fulminadas como
molestas moscas.
Desahogado el tiempo
respira
se hace música, idea,
horizonte,
santuario único,
inexpugnable.
Fuera ladra la noche
apaleada
por uniformes y llaves
inglesas,
pacta un armisticio con
la luna.
"Fuera ladra la noche apaleada por uniformes y llaves inglesas, pacta un armisticio con la luna". Sencillamente genial, de una altura poética formidable.
ResponderEliminarA veces pienso que la algunas máscaras son necesarias para soportar diferentes embates aunque el idealismo indique que las misma suelen distraer las verdades.
Un gran abrazo.
Las máscaras, ahí están, cercanas a nosotros, en dificil convivencia.
ResponderEliminarVersos que llegan al alma, los tuyos, María José con una estrofa final para quitarse el sombrero.
Besos
Hola María José, muy buenas tardes,
ResponderEliminartu entrada ha sido brillante,
que hay detras de la mascara y que se quiere esconder?
dos realidades que pactan, pero siempre hay un precio que pagar =(
(perdón, pero hoy me dejé llevar)
Te deseo una maravillosa noche de jueves
un cálido abrazo
Las máscaras que usamos para ser aceptados por una generalidad, las máscaras que nos pusimos para evitar conflictos, al final son sólo artificios que el tiempo desintegra. Me ha gustado tu poema.
ResponderEliminarBesos María José
Convivimos con muchas máscaras, a veces no nos damos cuenta de ello. Yo me pregunto el porqué de esconderse entre las sombras... seguramente habrá más de una respuesta.
ResponderEliminarBesos
Amigos gracias por vuestros comentarios y ese cariño que guardaré bajo llave.Besos
ResponderEliminarTodos nos escondemos, María José, tras máscaras diversas que pueden ir desde un uniforme hasta una pose y, a veces, es una cuestión de pura supervivencia.
ResponderEliminarEso sí, quitársela y ser uno mismo, es como eso de llegar a casa después de un día duro y tirar los zapatos de tacón a la mierda y caminar descalza.
Hermoso poema.
Namasté.
Hola María José, muy buenas noches. Bellos versos amiga, versos que vuelan libres, sin mascara y con luz brillante, es precioso tu poema, te felicito poeta, gracias María José por compartir tus letras, siempre es un placer llegar hasta aquí y leerlos, te dejo un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLola Barea.
En el espectro sutil de los sentidos, tu poema es un suspiro de sensualidad, de emoción sin contener, un caudal de aguas limpias donde sumergirse. Enhorabuena por tu talento. Un besito.
ResponderEliminarUNA VEZ MAS... GRACIAS POR TUS PALABRAS A LA HORA DEL TÉ, UN RITUAL QUE VIENE DE OTRAS TIERRAS Y QUE YO HE ADOPTADO. ES UN PLACER PARA MI Y UNA ALEGRIA INMENSA RECIBIR TANTOS MENSAJES.
ResponderEliminarUN BESITO.
Hola mi querida Mª José, regreso de mis largas vacaciones, casi tres meses y aquí me tienes disfrutando de tus vídeos , de tus bellos poemas.
ResponderEliminar!Ay las máscaras!Cuando uno se conoce así mismo, dentro de los limites de la inteligencia, se caen por completo las máscaras y se vive con la verdad de cómo somos y así hay que presentarse primero ante nosotros y después ante los demás.No seríamos bien vistos ante Dios , que bien sabemos que a él no se le puede engañar.
Gracias
te dejo un beso de ternura ojos.
Sor.Cecilia