Olivia,
tal vez un talismán
Es tímida, discreta,
permanece en silencio,
le gusta mi terraza,
la sombra de sus muros.
Se mimetiza siempre
detrás de la coraza
verde de las macetas,
la manguera la aturde
y por unos minutos
cambia de ubicación,
regresará mas tarde.
En el ocaso noto
su ingrávida presencia,
sus ojos en mis actos,
parece que le gusta
rondarme en las
lecturas
o cuando permanezco
en el dichoso limbo
que abre la poesía.
Foto tomada de la red.
1 comentario:
Maria José.
La verdad que me ha parecido un poema muy durioso.
Es bonito y con mucho sentimiento.
Un abrazo de buenas noches.
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